Finanzas para niños y niñas: ¿Cómo diferenciar entre deseo y necesidad?

Como mamá, papá o tutor, seguro has vivido ese momento en el supermercado cuando tus hijos e hijas quieren llevarse todos los juguetes o golosinas que ven. Enseñarles la diferencia entre una necesidad y un deseo, es clave para que aprendan a manejar su dinero y es algo que les ayudará mucho a medida que aprenden de finanzas para niños.

Alrededor de los 10 años, los peques están formando sus primeros hábitos con el dinero y puede ser la edad perfecta para que aprendan conceptos básicos que les ayudarán a ser unos cracks en sus finanzas cuando crezcan.

Además, si los niños y niñas aprenden a distinguir la diferencia entre necesidad y deseo desde una temprana edad, es probable que tomen mejores decisiones con su dinero a medida que crecen.

Cuando vayas de compras con tus hijos e hijas, aprovecha para explicarles qué cosas son "necesidades" y qué cosas son "deseos". Por ejemplo, cuando van al súper, comprar frutas y verduras es una necesidad, ya que son indispensables para alimentarse y estar sanos. En cambio, unas galletas o unas papitas, se consideran un deseo, ya que es algo que se antoja al momento, pero que no es vital para su nutrición.

También puedes jugar con ellos para reforzar el aprendizaje. Por ejemplo, con juegos en donde se utilice dinero de mentira y sea posible comprar diferentes cosas de manera simulada. Lo interesante es que aprendan a enseñarles a que tomen mejores decisiones al manejar su dinero, que no todo cuesta lo mismo y que no siempre podrán tener todo lo que quieren.

Si les das una pequeña cantidad de dinero cada semana y lo depositas en una cuenta especialmente pensada para niños y jóvenes, ellos pueden decidir en qué gastarlo. Cuando quieran comprar algo, pregúntales: "¿Es algo que necesitas o algo que quieres?", y "¿Vale la pena gastar tu dinero en esto?". Estas preguntas simples les ayudarán a pensar antes de tomar una decisión de compra.

Si tu hijo o hija quiere un juguete que cuesta mucho más que el dinero que les das cada semana, ayúdales a crear una meta de ahorro que sea realista para comprar ese juguete especial. Pueden usar su propia cuenta para ver el ahorro que van sumando mes a mes. Ver su progreso los motivará a seguir y les enseñará que para conseguir lo que quieren, a veces hay que esperar y tener un plan financiero.

No olvides que tus peques aprenden más de lo que ven que de lo que les dices. Cuando estén contigo, comenta en voz alta tus decisiones relacionadas con el ahorro y las metas, que sigan tu ejemplo. Mostrarles cómo tú mismo decides entre tus necesidades y deseos es la manera más efectiva de enseñarles a que tomen mejores decisiones al manejar su dinero.

Es importante que estas pláticas sobre “deseo” vs. "necesidad" sean naturales y seguidas. Aprovecha momentos como cuando ven anuncios en la tele y pregúntales: "¿Crees que realmente necesitamos eso o solo lo queremos porque se ve cool?". Otro ejemplo que puedes aprovechar es el momento de hacer la lista del súper para decirles, explicarles que primero se anotarán las cosas que se necesitan en casa y si sobra dinero, se podrá incluir algún gustito adicional.

Como parte de la enseñanza de finanzas para niños y niñas, que puedan aprender la diferencia entre "quiero" y "necesito" les da buenas bases para cuando crezcan. No se trata de que nunca compren lo que quieren, sino de que aprendan a valorar su dinero y a pensar antes de gastar.

Con estos consejos, tus hijos e hijas serán todos unos pro al manejar su dinero, y lo mejor es que lo aprenderán de forma divertida y pasándola bien contigo. ¡Así que háblales de dinero y empodera la salud financiera de tus peques!

No olvides que puedes ayudarles a fortalecer su futuro financiero teniendo una cuenta Link Card para chavos.