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Las exportaciones serán el principal impulsor del crecimiento económico en 2015: BBVA Bancomer

25 feb. 2015

La aceleración del Producto Interno Bruto (PIB) en el cuarto trimestre del 2014 se prolongará, por lo que la institución aún estima un crecimiento cercano a 3.5% para este año

  • La aceleración del PIB vista en el cuarto trimestre se extenderá a 2015 en respuesta al mejor desempeño de la economía de Estados Unidos. Se estima que EE.UU crecería 2.9% en este año y la economía mexicana tendría un crecimiento cercano a 3.5%.
  • Sería favorable que los sectores público y privado realicen un mayor esfuerzo para impulsar la inversión y los programas de infraestructura, con el objetivo de acelerar el crecimiento de la actividad económica.
  • La institución estima que el recorte al gasto tendrá un efecto marginal en el crecimiento en la medida que se concentre en gasto corriente y ante la baja contribución que el gasto público ha tenido en el crecimiento del PIB.
  • La inflación resultó menor a la esperada y se mantendrá cercana a la meta del Banco de México de 3.0% durante la mayor parte del año.
  • La institución financiera esperamos que una vez que la economía muestre signos de mejoría, se vea claridad sobre el inicio y magnitud de subidas de la tasa de política monetaria de EE.UU., y en ausencia de caídas adicionales en el precio del petróleo, el peso podría apreciarse hacia niveles alrededor de 14 pesos por dólar.

La economía mexicana tuvo un desempeño más favorable en el cuarto trimestre de 2014 por el impulso de la demanda externa, el cual se espera continúe durante el presente año, aunque el consumo privado se mantiene todavía débil. Para 2015 se prevé un crecimiento económico de 3.5% anual resultado de un crecimiento en Estados Unidos (EE.UU) de 2.9% y un peso mexicano más depreciado que apoyaría las exportaciones y limitaría las importaciones.

Esta estimación tiene un sesgo a la baja ante el recorte al gasto público recientemente anunciado, la posibilidad de que la demanda interna privada no muestre una recuperación más sostenida a pesar de la mejora que se espera en el sector manufacturero, y que la caída reciente en la producción petrolera no se revierta en los próximos meses.

En principio el recorte gubernamental se concentrará en gasto corriente, y dado el limitado efecto que ha tenido el gasto público sobre el crecimiento, se espera que esta medida tenga un impacto marginal en el crecimiento del PIB en 2015, el cual podría ser compensado por la mejora que se está observando en la economía de EE.UU.

Como se anticipaba, la inflación anual disminuyó sensiblemente, pasando de 4.08% en diciembre a 3.07% en enero. Esta caída en la inflación es consecuencia principalmente de la dilución del efecto del aumento impositivo de 2014, y los menores precios en los servicios de telecomunicaciones tras entrar en vigor la eliminación del cobro de larga distancia nacional, pero también tras verse los primeros efectos positivos para los consumidos derivados de mayor presión competitiva, a raíz de la aprobación de la reforma en telecomunicaciones.

La fuerte caída de la inflación anual en enero sugiere que la inflación podría cerrar 2015 en torno a 2.9%. De esta manera, se espera que la inflación se mantendrá cercana a la meta del Banco de México de 3.0% durante la mayor parte del año. Entre los riesgos al alza para la inflación destacan el posible traspaso de la depreciación cambiaria y en mayor medida aumentos en los precios agropecuarios.

Los bajos niveles de inflación aunados a la holgura en la economía resultado del bajo crecimiento en 2013 y 2014 sugieren que le banco central tiene espacio para mantener la tasa de referencia sin cambio todavía por un periodo prologado. Ahora bien, la mejora en la economía reduciría paulatinamente la holgura en la economía, y en su comunicación el banco central ha mencionado la alta probabilidad de que las tasas de interés domésticas deban incrementarse ante un incremento fuerte de las tasas de interés de EE.UU. De esta manera, se espera un ajuste pausado de la tasa de política monetaria, en sincronía con el ciclo económico y monetario de EE.UU, con lo que se prevé que la tasa monetaria cierre este año en 3.5%.

Durante los dos primeros meses del año a un contexto económico de caída en los precios del petróleo y de menor crecimiento global, con excepción de EE.UU., se han añadido dos nuevos factores de incertidumbre: la expectativa de un inicio anticipado del ciclo de aumentos en la tasa de política monetaria de la Reserva Federal y las dudas sobre las negociaciones de un nuevo paquete de rescate a Grecia. Estos dos nuevos factores han pesado en los mercados financieros en México.

Por una parte la volatilidad y la cotización del tipo de cambio se han incrementado, con lo que el peso ha llegado a cotizar por encima de los 15 pesos por dólar por primera vez desde marzo de 2009. Por otra, las tasas de interés de la deuda gubernamental de largo plazo han mantenido su alta correlación con sus similares de EE.UU. con lo que ante la expectativa en los mercados financieros de un alza más pronta de la tasa de fondos federales hacia el verano de este año, las tasas de interés de largo plazo mostraron un punto de inflexión e iniciaron una tendencia alcista que ha continuado durante la primera quincena de febrero. Vale la pena mencionar que a pesar de la expectativa de aumento en las tasas de interés en EE.UU, los flujos de inversión extranjera en instrumentos de renta fija han continuado.

Hacia adelante BBVA Bancomer espera que los datos macroeconómicos de EE.UU, y la comunicación de la Reserva Federal, estén en el centro de la atención de los mercados ante la cercanía del inicio del proceso de normalización monetaria. En materia cambiaria, se espera que una vez que la economía muestre signos de mejora, haya claridad sobre el patrón de alza de la tasa de fondos federales, y en ausencia de caídas adicionales en el precio del petróleo, el peso podría apreciarse hacia niveles alrededor de 14 pesos por dólar al finalizar el año.

En relación a las tasas de interés de la deuda gubernamental, el escenario más probable sigue siendo su aumento gradual ante la perspectiva de incremento en la tasa monetaria de EE.UU y México. En este sentido, para fin de año la institución anticipa que el rendimiento de la Nota del Tesoro de EE.UU a 10 años se ubicará en torno a 2.6% mientras que el del bono mexicano a 10 años se situará en alrededor de 6.1%.

¿Dónde se puede encontrar la publicación?

La publicación “Situación México” correspondiente al Primer Trimestre de 2015 se realizó bajo la dirección de Carlos Serrano, Economista Jefe de BBVA Bancomer, y de Arnoldo López, Economista Principal de Análisis Macroeconómico México de BBVA Bancomer y editor de la revista y el equipo formado por Javier Amador, Iván Martínez, Javier Morales y Juan Carlos Rivas economistas encargados de la elaboración de la publicación, además de contar con la participación del área de Escenarios Económicos de BBVA Research.
 

Contacto:

Carmen Peña Álvarez
Comunicación Externa
Tel. 56-21-18-53
carmen.pena@bbva.bancomer.com