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Entendiendo las decisiones de Política Monetaria

4 nov. 2022

Rafael Jara

En los últimos días se han dado anuncios de política monetaria en varios Bancos Centrales de países desarrollados. A diferencia de meses anteriores, las razones detrás de las subidas de la tasa de interés han dejado de ser homogéneas y los comunicados han mostrado las distintas dinámicas económicas que hoy enfrentan las economías avanzadas. Si bien, el punto en común es la inflación, son distintas las presiones inflacionarias que enfrenta cada país. Se pueden mencionar tres las dimensiones con las que se pueden evaluar las posturas: la velocidad de subida de tasas objetivo, el nivel de la tasa terminal y el tiempo que mantendrán las tasas en su nivel máximo.

El Banco de Canadá (BoC) decidió subir su tasa objetivo 50 puntos base (pbs) a 3.75%, por debajo de los 75pbs que esperaba el mercado, una decisión menos “hawkish”, que es la referencia a una política monetaria restrictiva.  El menor ritmo de actividad económica, la moderación de presiones inflacionarias y el temor a un sobre ajuste monetario fueron los principales factores que llevaron a reducir la velocidad de subida de tasas de 75pbs a 50pbs en esta junta. Asimismo, mencionaron que están cada vez más cerca del final del ajuste monetario por lo que se espera que la tasa terminal este entre 4.25% y 4.50%. 

El Banco Central Europeo (BCE) decidió subir su tasa de depósito en 75pbs a 1.50%, en línea con lo esperado por el mercado. Mencionó que se esperan mayores subidas de tasa, no obstante, estas dependerán de la evolución de las expectativas de inflación, datos económicos y probabilidad de recesión. Reconoció que ya subieron 200pbs la tasa objetivo y que hay un retraso en el efecto de dicho ajuste en la economía y que cuanto más se acerquen a la tasa neutral de 2.00% más cuidadosos serán en mayores ajustes. Este mensaje más “dovish”, que es el término usado para referirse a una política expansiva mediante la cual un banco central relaja las tasas de interés para estimular la economía por medio de mayor inversión, sugiere que disminuirán la velocidad de ajuste para las siguientes reuniones. La tasa terminal se espera que este alrededor del 2.50%.

La Reserva Federal de Estados Unidos (FED) subió su tasa en 75pbs llegando al rango de 3.75% - 4.00%. Sugirió que podrá disminuir el ritmo de subida, pero alcanzando una tasa terminal más elevada. Las últimas cuatro subidas de 75pbs es reflejo del fuerte desbalance en el mercado laboral americano, donde por cada desempleado hay casi dos puestos de trabajo disponibles. Resaltaron que ya subieron 375pbs la tasa objetivo y que el tiempo y magnitud del impacto en la economía es aún incierto. Si bien el mercado de viviendas muestra desaceleración, los datos de empleo siguen siendo muy robustos. La conferencia de prensa con un tono más “hawkish” elevó la expectativa de tasa terminal. Esta se sitúa alrededor del rango 4.75% - 5.00%. 

Finalmente, el Banco de Inglaterra (BoE) elevó su tasa en 75pbs a 3.00%. Su comunicado señaló que mayores aumentos serán necesarios pero que la tasa terminal será inferior a lo que traía en precio los mercados financieros de 5.00%.  A diferencia de Estados Unidos donde las hipotecas son a tasa fija hasta por 30 años, las hipotecas en Inglaterra son a tasa fija los primeros 2 a 5 años y de ahí cambian a tasa variable, este ajuste afecta considerablemente al consumidor. Este factor sumado a un elevado déficit fiscal que necesita financiarse con emisión de deuda pública hace que sea más difícil para el BoE subir la tasa a niveles más elevados. Se espera que la tasa terminal este alrededor del 4.50%. 

Hay mayor certeza respecto a la reducción de la velocidad de ajuste monetario y al nivel de tasa terminal de estos Bancos Centrales. Al parecer se está más cerca del fin del ciclo de ajuste monetario. No obstante, existe incertidumbre respecto al tiempo que mantendrán las tasas objetivo en sus niveles máximos antes de comenzar un ciclo expansivo como consecuencia de una recesión. El mercado espera que los recortes comiencen en la segunda mitad del 2023, pero puede dilatarse hasta el 2024 si la inflación no cede a los niveles esperados. Aun así, luego de un par de años complicados para los instrumentos de renta fija, los niveles actuales de tasa de interés son históricamente muy atractivos. El interesante retorno ajustado por riesgo que ofrecen actualmente los instrumentos de renta fija es un factor a considerar en la composición de sus portafolios de inversión. 

 

Rafael Jara Padilla
Executive Director Fixed Income Latam Investments – BBVA Asset Management
r.jara@bbva.com