Conoce los tipos de extintores y su uso

Contar con un extintor en casa, oficina o negocio puede ser la diferencia entre un incidente controlado y una tragedia. Sin embargo, no todos los extintores son iguales, ni todos los incendios requieren el mismo tratamiento. Por eso, conocer los tipos de extintores y su uso es imperativo para actuar con rapidez ante una emergencia.  

Cada extintor está hecho para apagar un tipo específico de fuego, según el material que lo provoca, como papel, grasa, equipos eléctricos o metales. Los fuegos se clasifican en clases A, B, C, D y K, y esta clasificación determina cuál es el extintor más adecuado para usarse.

La clasificación de extintores se basa tanto en el tipo de fuego que pueden apagar como en el agente que utilizan para hacerlo. Cada extintor está diseñado para actuar con mayor eficacia dependiendo del material combustible involucrado, como sólidos, líquidos, gases, metales o grasas de cocina.

Existen diferentes tipos de fuegos (Clase A, B, C, D y K), y a partir de ellos se determina el extintor más adecuado:

Además, la clasificación de extintores también puede considerar su peso; por ejemplo, hay portátiles menores a 20 kg y móviles con ruedas, pensados para uso industrial.

Por último, es fundamental conocer los componentes de un extintor, que incluyen: manómetro, válvula, boquilla, seguro, etiqueta con instrucciones y, por supuesto, el agente extintor. Todos estos elementos permiten su uso seguro y eficaz en una emergencia.

Un extintor es un dispositivo portátil diseñado para apagar incendios en sus primeras etapas, evitando que se propaguen y se conviertan en una emergencia mayor. Su uso rápido y adecuado puede marcar la diferencia entre un incidente menor y un desastre.

Este equipo consiste en un cilindro metálico, normalmente de color rojo, que contiene un agente extintor específico —como agua, espuma, polvo químico o CO₂— encargado de sofocar las llamas. Al accionar la válvula, el agente se libera a presión a través de una boquilla, permitiendo dirigirlo hacia la base del fuego.

El funcionamiento de un extintor se basa en interrumpir al menos uno de los tres elementos esenciales del fuego: el combustible, el oxígeno o el calor. Dependiendo del agente, puede enfriar el material en combustión, desplazar el oxígeno o detener la reacción química que mantiene el fuego.

Tipos de extintores recomendados para casa

Extintor de polvo químico seco

Es el más común en los hogares por su capacidad para apagar incendios de tipo A (materiales sólidos como madera o papel), B (líquidos inflamables como aceites o gasolina) y C (gases inflamables). Su versatilidad lo convierte en una opción ideal para casi cualquier habitación de la casa.

Extintor de agua

Utiliza agua a presión con aditivos especiales para combatir fuegos tipo A y B. Aunque es eficaz en ciertos contextos, no es adecuado para incendios eléctricos, lo que limita su uso en ambientes con electrodomésticos.

Extintor de CO2 (gas)

Este tipo funciona sofocando el fuego al desplazar el oxígeno. Es una alternativa limpia, ideal para equipos electrónicos, pero debe usarse con precaución, ya que puede reducir peligrosamente el oxígeno disponible para las personas en espacios cerrados.

Extintor de espuma

Aunque apaga eficientemente incendios de tipo A y B, deja residuos difíciles de limpiar y no es efectivo contra fuegos eléctricos. Por ello, su uso en casa puede no ser la mejor opción.

Saber cómo usar un extintor te ayudará a prevenir incendios, ya que podrás actuar con rapidez y seguridad.

1. Verifica que esté cargado y con presión: Antes de acercarte al fuego, asegúrate de que el extintor esté en condiciones. Revisa el manómetro y si la aguja está en la zona verde, está listo para usarse.
2. Quita el seguro: Retira el pasador o anillo de seguridad que impide que se accione la palanca accidentalmente. Guárdalo por si necesitas colocarle uno nuevo tras su uso.
3. Colócate a una distancia segura: Ponte a unos tres metros del fuego. Esta distancia te protege del calor directo y te da un buen margen para maniobrar.
4. Apunta a la base del fuego: Dirige la boquilla del extintor hacia la parte baja de las llamas. No apuntes directamente a las llamas, ya que el objetivo es atacar el foco del incendio.
5. Presiona la palanca: Sujeta firmemente el extintor y presiona la palanca superior para liberar el agente extintor.
6. Haz un movimiento en zigzag: Desplaza la boquilla de lado a lado cubriendo toda el área afectada. Esto permite apagar completamente todos los focos activos.
7. Coloca el extintor en el suelo: Una vez apagado el fuego, deja el extintor en el piso de forma horizontal. Esto indica que ya fue utilizado y necesita ser recargado.

Un incendio en casa puede ocurrir en cualquier momento, incluso cuando creemos tener todo bajo control. Desde una sobrecarga eléctrica hasta una fuga de gas no detectada a tiempo, las causas pueden ser diversas y los daños, devastadores. Por eso, contar con un seguro de hogar no solo es recomendable, sino primordial para proteger tu patrimonio y brindar seguridad a tu familia.

Uno de los primeros pasos para prevenir situaciones de riesgo es aprender a detectar una fuga de gas de forma temprana. Un olor extraño, el silbido de una tubería o un aumento inusual en el consumo pueden ser señales de alerta. Sin embargo, incluso con precaución, los accidentes suceden. Y cuando ocurren, tener una póliza que incluya coberturas de seguro de hogar amplias puede marcar la diferencia entre una recuperación rápida o una pérdida económica significativa.

Muchas personas se preguntan cuál seguro de hogar contratar entre tantas opciones disponibles. La respuesta está en buscar uno que cubra no solo los daños por fuego, sino también las consecuencias colaterales: humo, explosiones, afectaciones a vecinos o pérdida de bienes. Además, algunas pólizas ofrecen servicios adicionales como asistencia en emergencias o evaluación de riesgos para evitar futuros incidentes.

Contar con un extintor en casa y saber cómo usarlo es un paso indispensable para estar preparado ante una emergencia; sin embargo, también es importante considerar una protección más amplia que respalde tus bienes y tu seguridad en caso de que el incidente se salga de control.

Si estás buscando un seguro contra incendios, el Seguro de Hogar de BBVA cubre los daños materiales causados por incendio o rayo, sin que tengas que pagar nada por ellos. Además, incluye servicios de asistencia médica, como asesoría telefónica, envío de un médico a tu domicilio o ambulancia terrestre, para que tú y tu familia estén protegidos en todo momento.