Un hábito es una “costumbre o práctica adquirida por frecuencia de repetición de un acto". Se podría decir que un mal hábito financiero es toda acción aprendida que se repite e implica el manejo del dinero y te causa perjuicios de cualquier tipo, como la falta de efectivo o los gastos innecesarios.
El cerebro tiende a aprender hábitos porque implican hacer menos esfuerzo para realizar determinadas acciones. Son como caminos ya trazados, que no debe descifrar el cerebro cada vez que los vaya a recorrer.
Los malos hábitos crean una cadena de otros semejantes, pero también pueden ser cambiados por otros que sean beneficiosos para ti. No es suficiente con saber qué es un mal hábito financiero para modificarlo, sino que requieres de un proceso que empieza con la identificación del mismo.