Son plásticos “extra” que derivan de la tarjeta de crédito de una persona, quien funge como “titular”.
Por lo general este tipo de tarjetas de crédito se tramitan para un familiar directo del titular ya que los gastos y disposiciones de dinero que realice el tarjetahabiente adicional, se reflejarán en el estado de cuenta de la persona que es el titular.
O sea, es el titular quien adquiere la obligación legal de pagar tanto la deuda de su crédito como la de los créditos adicionales.
Los 3 usos más comunes y recomendados de una tarjeta de crédito adicional:
- padres de familia que quieren dar un respaldo económico a sus hijos que aún no son independientes financieramente, pero que necesitan realizar disposiciones o movimientos bancarios, por ejemplo en el caso de que estudien fuera de la ciudad o el país
- parejas o matrimonios que están bien organizados para cubrir los gastos comunes y pagos del hogar con las tarjetas de crédito y así aprovechan algún beneficio o descuento
- para personas que necesitan o desean hacerse cargo económicamente de algún familiar que no puede mantenerse por sí mismo o no genera ingresos propios
Lo mejor es que son grátis, el trámite para solicitarlas es muy fácil y pueden aprovechar las mismas promociones y descuentos que se brindan para la tarjeta de crédito del titular.
Y el titular puede aprovechar que todas las compras hechas con las tarjetas adicionales que den puntos para programas de recompensas se “abonan” a la tarjeta del titular.